Descubrimos junto a la ‘Maison’ los pilares fundamentales que hacen que la manufactura relojera de CHANEL sea el corazón de sus joyas relojeras
Una historia de diseño técnico
La firma parisina inició su viaje en la relojería en 1987 con el lanzamiento del icónico reloj Première. Desde entonces, CHANEL ha evolucionado, integrando tecnología de vanguardia con la artesanía tradicional para crear piezas que son verdaderas obras de arte. Cada reloj refleja la filosofía de la fundadora, Gabrielle Chanel, quien creía en la unión perfecta entre elegancia y funcionalidad.
La Manufactura relojera de CHANEL
Ubicada en La Chaux-de-Fonds, Suiza, el lugar por excelencia del universo de la alta relojería. Este centro no solo alberga talleres donde se realizan las etapas cruciales del ensamblaje y ajuste de los relojes, sino que también es un espacio donde la innovación se encuentra con la tradición.
Los Movimientos
Uno de los aspectos más destacados de la relojería de CHANEL es su capacidad para crear movimientos propios. El Calibre 1 es un ejemplo emblemático de ello, se trata del primer movimiento interno completamente desarrollado y ensamblado por CHANEL. Este movimiento se caracteriza por su arquitectura contemporánea y su excepcional precisión, demostrando el compromiso de la marca con la excelencia técnica y su adaptación constante al avance continuo de la tecnología.
Materiales y Diseño
CHANEL se distingue por incorporar las últimas tendencias en materiales. La cerámica, en particular, se ha convertido en un distintivo de la marca, destacándose por su durabilidad, resistencia y elegancia. El proceso de fabricación de la cerámica de alta tecnología es realmente complejo y requiere un control exacto de temperatura y presión para obtener el acabado perfecto. Además, los relojes CHANEL incorporan detalles de diseño inspirados en los elementos icónicos de la moda de la casa, como el tweed y la Camelia.
Artesanía y Detalles
Cada pieza de la firma es el resultado de una excelencia artesanal. Desde la elaboración de esferas con técnicas tradicionales como el esmalte y la guilloché, hasta la incrustación de piedras preciosas con una precisión exquisita, cada detalle es meticulosamente trabajado y supervisado. Los maestros relojeros de CHANEL combinan habilidades tradicionales con tecnología actual para asegurar que cada reloj no solo represente la belleza de la marca, sino su excepcional fabricación funcional.
Innovación y Sostenibilidad
CHANEL no solo mira hacia el pasado con respeto, sino que también se proyecta hacia el futuro con innovaciones en sostenibilidad y tecnología. La marca está comprometida con prácticas responsables, desde la selección de materiales hasta los procesos de fabricación que minimizan el impacto ambiental.
La manufactura relojera de CHANEL es un testimonio de la combinación perfecta entre arte, diseño, técnica y amor por el oficio. Cada reloj es una manifestación del legado de la marca, sus valores y su visión. Para aquellos que buscan una pieza que representa la elegancia atemporal, precisión y exclusividad, un reloj CHANEL es, sin duda, la elección definitiva.
